lunes, 20 de octubre de 2008

poder de la música

En el ascensor del Abasto, subiendo desde el estacionamiento hasta el primer piso. La música que pasan dentro del mismo es realmente buena. Groovy. Me da placer escucharla. Cuando llego al piso de los cines, la puerta automática se abre pero no me bajo; dejo que se cierre y vuelvo al subsuelo para no dejar de escuchar esta música increíble.

2 comentarios:

Belén dijo...

te re entiendo porque yo hago lo mismo en los negocios. y tambien me pasa que si la musica es pumba pumba pumba pumba me retiro a mi jardin.

Unknown dijo...

Nunca me subo a un ascensor a no ser que sea extremadamente necesario (esto es, más de 4 pisos o un edificio desconocida de escaleras sombrías)